Un viaje al rededor de los museos

Museos pequeños, museos con encanto, museos poco conocidos, museos y/o fundaciones de mis artistas o arquitectos favoritos, museos que he tenido el gusto de visitar y que, por diferentes razones, merecerían volver a ser visitados.

Todos los textos y fotos de este blog son autoría y propiedad de Agustín Calvo Galán. Si quieres citarlos o usar las fotos, puedes hacerlo; pero, por favor, indica la procedencia y la autoría. Gracias.

sábado, 10 de enero de 2015

Legion of Honor de San Francisco (EE.UU.)

Pocos museos en el mundo pueden presumir de haber aparecido en una película de Alfred Hitchcock. El Museo de Bellas Artes de San Francisco, Legion of Honor, sí: aparece en una intrigante escena de su película Vertigo -que en España se tituló: De entre los muertos- cuando el detective que encarna James Stewart sigue hasta el Museo a Madelaine -Kim Novak-, donde la encuentra mirando el retrato de una mujer que lleva su mismo peinado.
El Museo Legion of Honor sorprende, en primer lugar, por su arquitectura: un revival del estilo neoclásico francés. En su origen fue una donación a San Francisco de Alma Spreckels, prócer de la ciudad y esposa del magnate del azúcar Adolph B. Spreckels, quien se había enamorado del pabellón francés de la Exposición Internacional que se celebró en la ciudad del Pacífico en 1915 y que reproducía, a su vez, el palacio de la Legión de Honor de París del siglo XVIII. Al finalizar la Exposición consiguió que el gobierno francés le permitiría hacer una réplica permanente del edificio parisino y convenció a su marido para que lo llevara a cabo con el fin de donar a la ciudad un Museo de Bellas Artes compuesto por sus propias colecciones de arte. La I Guerra Mundial retrasó la ejecución del proyecto, que se inauguró en 1924 como homenaje a los caídos californianos en la Gran Guerra.
El Museo se encuentra lejos del centro de la ciudad, pero está situado en el magnífico Lincoln Park, desde donde podemos tener unas bellísimas vistas del famoso puente Golden Gate y de la entrada a la inmensa bahía de San Francisco. Cuando entramos, en el patio central del edificio, podemos ver una de las obras más icónicas que muestra el museo: El pensador de August Rodin; es decir, una de las reproducciones en bronce que supervisó el propio Rodin en vida, de quien los Spreckels adquirieron una gran colección de esculturas que ahora podemos admirar en varias salas del Museo, así como sus colecciones de pintura francesa de los siglos XVIII y XIX. A los largo del siglo XX el Legion of Honor fue ampliando las valiosas colecciones con las aportaciones de otros donantes de la alta sociedad californiana como Archer M. Huntington, Mildred Anna Williams y Albert Campbell Hooper, así como Roscoe y Margaret Oakes que donaron su destacada colección de arte holandés, flamenco y británico de los siglos XVII, XVIII y XIX, con obras muy representativas de, entre otros, Rembrandt, Rubens, van Dyck, y Gainsborough. Otro donante significativo fue Samuel H. Kress, quien aportó una parte de su colección con grandes obras de El Greco, Pieter de Hooch y Tiepolo. Por si todo esto fuera poco, también se incorporaron colecciones arte Antiguo y fotografía.
La cosmopolita y liberal ciudad de San Francisco cuenta con numerosos atractivos, entre ellos se encuentra, sin duda, este estupendo Museo Legion of Honor, que muestra orgulloso el legado de la alta sociedad norteamericana de principios del siglo XX, que empleó su poderío económico en la sabia adquisición de obras de Arte y que supo, a su vez, desprenderse de ellas para el enriquecimiento cultural de sus compatriotas.

http://legionofhonor.famsf.org/