Un viaje al rededor de los museos

Museos pequeños, museos con encanto, museos poco conocidos, museos y/o fundaciones de mis artistas o arquitectos favoritos, museos que he tenido el gusto de visitar y que, por diferentes razones, merecerían volver a ser visitados.

Todos los textos y fotos de este blog son autoría y propiedad de Agustín Calvo Galán. Si quieres citarlos o usar las fotos, puedes hacerlo; pero, por favor, indica la procedencia y la autoría. Gracias.

miércoles, 12 de febrero de 2014

El Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca

Cuando en 1966 se inauguró el Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, muy pocas, por no decir ninguna, de las ciudades españolas tenían un museo de arte contemporáneo. La iniciativa partió del insigne Fernando Zóbel, aportando su colección privada, y contó con la colaboración de Gustavo Torner y Gerardo Rueda, los tres fundadores del museo que, gracias a un acuerdo con el Ayuntamiento de Cuenca, pudieron adecuar las famosas Casas Colgadas como sede de la institución. Sin duda, la localización del Museo es otro de los platos fuertes que nos depara su visita, y nunca mejor dicho porque las Casas Colgadas sobre la Hoz del río Huécar son un lugar incomparable, único en España, con cierto parecido a los monasterios ortodoxos de Meteora en Grecia, y crean una de las imágenes más icónicas de la ciudad de Cuenca.
En 1980, Fernando Zóbel donó su colección a la Fundación Juan March, institución que a partir de aquel momento se encargaría de gestionar el Museo, además de completar e incrementar sus fondos permanentes, asegurando su continuidad.
El Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca es una pieza fundamental para entender el arte contemporáneo español de la segunda mitad del siglo XX. Cuenta con obras cumbres como la tremendista Brigitte Bardot de Antonio Saura, esculturas de Chillida y Oteiza, el aéreo y poético Ornitóptero del mismo Zóbel, el oscuro y solemne Sarcófago para Felipe II de Manuel Millares, o la grave y despojada Grande Equerre de Antoni Tàpies, entre otras muchas obras. Grupos como El Paso, Dau al Set o Crónica, que renovaron por completo la manera de hacer y vivir el arte en la España gris de los años cincuenta y sesenta, están perfectamente representados.
La inmejorable y aireada disposición de las obras dentro del edificio, así como las ventanas que abren la mirada al exterior de las Casas Colgantes, hacen de la visita al Museo un ameno diálogo con el arte abstracto español, entre el espacio y unas sensibilidades enriquecedoras, a veces rotundas, a veces ligeras.

http://www.march.es/arte/cuenca/